TRANSEXUALIDAD-EUSKADI pide apoyo a Presidente Gobierno para inclusión de la Cirugía de Reasignación Sexual dentro del catalogo de prestaciones gratuitas del Sistema Nacional de Sanidad Pública.
Señor Presidente del Gobierno:
Ya ha mostrado Usted con hechos su interés por las circunstancias del colectivo transexual, al apoyar la presentación en las Cortes Generales y la aprobación por el Congreso de los Diputados de la llamada Ley de Identidad de Género.
A la vez que le agradecemos este posicionamiento, debemos recordarle que quedan importantes flancos de su Discurso de Investidura, que no se han cumplido en lo referido a nuestro colectivo, particularmente los que se deducen del siguiente párrafo: (*1)
“Ha llegado también el momento de poner fin, de una vez, a las intolerables discriminaciones que aún padecen muchos españoles por razón exclusiva de su preferencia sexual. Lo diré con claridad: homosexuales y transexuales merecen la misma consideración pública que los heterosexuales y tienen el derecho a vivir libremente la vida que ellos mismos hayan elegido. Modificaremos, en consecuencia, el Código Civil para reconocerles, en pie de igualdad, su derecho al matrimonio con los efectos consiguientes en materia de sucesiones, derechos laborales y protección por la Seguridad Social”.
Si bien es cierto que el pasado mes de septiembre el Gobierno abrió la puerta a que la sanidad pública costease el cambio de sexo, en la nueva redacción se eliminan las restricciones a que la sanidad pública pague la reasignación de sexo de los transexuales. Hasta el pasado 15 de septiembre se excluían estas operaciones expresamente, salvo en casos de "intersexualidad patológica". Simplemente se prepara la lista por si, tras la aprobación de la ley de Identidad de Género, que regulará el cambio de papeles de las personas transexuales, el Gobierno decide que hay que financiar con dinero público el costoso proceso (entre 18.000 y 30.000 euros dependiendo si el paso es de hombre a mujer o a la inversa), teniendo en cuenta que estos costes se refieren a la Sanidad Privada, por lo que se mercantiliza.
La modificación en lo que se refiere al cambio de sexo no quiere decir que, de momento, se vaya a incluir el proceso en la lista de prestaciones comunes, explicó la ministra de Sanidad, Elena Salgado, pero que una prestación no está en la lista no quiere decir que un Gobierno autonómico no pueda facilitarla. Cada consejería de Sanidad decide si sufraga lo que cree conveniente (nunca menos que lo de la lista), pero debe encontrar los fondos necesarios sin acudir al Gobierno central. Por lo tanto desde nuestro punto de reflexión esta medida, es ya no solamente contradictorio, sino, también, totalmente marginatorio y contra la igualdad.
En el caso de la atención a las personas transexuales, tal política, que nos presenta serios interrogantes:
a) La elección de la Sanidad Pública puede ser una cuestión de calidad, no de coste. Las personas transexuales se ven obligadas así a recurrir a la Sanidad Privada, cuando en otras Comunidades disponen de los medios superiores de la Pública.
b) Es fácil pensar que cualquier comunidad pretende, con esta medida, eximirse de la responsabilidad de crear una Unidad de Identidad de Género pública e Interdisciplinar, que trabaje con los costes justos y tenga el nivel de la que existe ya en otra Comunidad Autónoma.
Todo ello redunda en la desigualdad de los ciudadanos españoles, y en su perjuicio, ante la Sanidad pública, por lo que solicitamos de Usted que, haga lo posible para que esta desigualdad no se consolide.
Andrea Muñiz Celestino
Presidenta de, TRANSEXUALIDAD-EUSKADI
(Asociación de Transexuales de Euskadi)
(*1) Página 18 del Discurso de Investidura, séptimo y octavo párrafo, y página 24 del Discurso de Investidura, tercer párrafo.